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27 de diciembre de 2012

Resumen (reseña) y análisis de El retrato de Dorian Gray de Oscar Wilde


Resumen (reseña) y análisis de

El retrato de Dorian Gray de Oscar Wilde




Argumento: 

       El artista Basil Hallward ha pintado el retrato de Dorian Gray, su joven y fascinante amigo. Un amigo de Basil, Henry Wotton, encuentra a Dorian y lo incita a disfrutar plenamente de su juventud, convenciéndolo con la idea de que la belleza y el placer son todo en la vida y que el tiempo para disfrutar siempre es breve. Para él, la belleza es una forma de genialidad que no tiene necesidad de ser explicada, es la maravilla de las maravillas y posee un derecho de soberanía sobre todas las cosas. Explica de qué manera la Naturaleza tiene la capacidad de regenerarse, capacidad desconocida por los seres humanos que no pueden retornar nunca a la juventud perdida, degenerando en marionetas obsesionadas por el recuerdo de sus pasiones (a las que temían y de sus tentaciones (a las que no cedieron por cobardía).Henry exhorta a Dorian a no perderse  ningún placer y a estar siempre en busca de nuevas sensaciones.

 Dorian expresa un  deseo claramente imposible:  que sea la imagen del retrato  la que envejezca y no él , cosa que logra. Mientras Dorian conserva el encanto y la juventud, la figura pintada en el retrato, imagen de su ser interior, va mostrando día tras día el paso del tiempo, sus vicios y su  corrupción, llegando a tranformarse en un ser horrendo.

Siguiendo las lecciones de Henry Wotton, Dorian se abandona a todos los placeres prohibidos hasta llegar al homicidio del pintor quien le reprochara su comportamiento. También llega a causar el suicidio de su enamorada Sybil y el de su amigo Alan Campbell,  quien lo había  ayudado a hacer desparecer el cuerpo de Basil.

Las últimas páginas de la novela muestran todos los pensamientos y las emociones contradictorias que asaltan a Dorian cuando este se da cuenta en  lo que se ha convertido,  disgustado consigo mismo y con monstruosa imagen del retrato.

A pesar de ser consciente de los crímenes que ha cometido, no se culpa a sí mismo: cree que el retrato y el pintor son los verdaderos responsables de todo lo sucedido.  Ha perdido completamente  la objetividad y a pesar de sentirse abrumado por la culpa, no quiere confesar sus acciones, en un nuevo acto de vanidad y orgullo, así como de cobardía. Decide , entonces, destruir la pintura que es su conciencia y el único testigo  e indicador de su culpabilidad. Dorian acuchilla a la pintura con un puñal, pero esto causa su propia  muerte, mientras  que la imagen del retrato vuelve a la perfección original.


Análisis

El retrato de Dorian Gray tiene un paratexto  altamente significativo: el Prefacio. En él, Wilde expone de manera sintética su concepción acerca de la amoralidad del arte y el arte como fin en sí mismo. Es, por lo tanto, una poética, es decir, un texto donde el autor reflexiona acerca de la producción literaria en general y de la suya  en particular, exponiendo conclusiones acerca de  los métodos de composición, la función del arte en la sociedad, la relación entre el artista y la obra, el lector y la obra, y otras cuestiones.

En este caso, el prefacio, además de plantear  la estética del autor, es una guía de lectura de la novela, ya que esta va diseminando como tópicos estas mismas reflexiones que primero se resu­men teóricamente.

Los siguientes son fragmentos del Prefacio:

Prefacio
El artista es el creador de cosas bellas. Reve­lar el arte y ocultar al artista es la finalidad del arte. [...]
Los que encuentran intenciones feas en cosas bellas están corrompidos sin ser encantadores. Esto es un defecto.
Los que encuentran bellas intenciones en cosas bellas son cultos. A estos les queda esperanza. [...]
Un libro no es, en modo alguno, moral o inmoral. Los libros están bien o mal es­critos. [...] La vida moral del hombre forma parte del tema para el artista; pero la moralidad del arte consiste en el uso perfecto de un medio imperfecto. Ningún ar­tista desea probar nada. Hasta las cosas ciertas pueden ser probadas.[...]
Podemos perdonar a un hombre el haber hecho una cosa útil en tanto que no la admire. La única disculpa de haber hecho una cosa inútil es admirarla intensamente.
Todo arte es completamente inútil.

Elretrato de Dorian Gray, Buenos Aires. Biblioteca Bàsica Salvat, 1968.


PERSONAJES
Analizaremos a tres de los personajes masculinos: Dorian Gray, Basil Hallward e Henry Wotton.

 Dorian es un joven de bello aspecto y de nobles sentimientos que en la vida no hace más que cultivar la elegancia y la amistad. Sui juventud lo lleva a dejarse  influenciar por las ideas de Wotton, Las cuales lo conducen por el camino equivocado. Dorian vive de apariencias Y esto le provoca una gran insatisfacción y le hace sentir  repugnancia de sí mismo.

Lord Henry Wotton es un  noble clásico hedonista, escéptico y narcisista, observador de la vida y  amante del placer. Es el aspecto oscuro de Dorian.

Basil Hallward es un artista, pintor, aquel que plasma la belleza.  A partir de algunas expresiones  podemos inferir que se ha encaprichado con Dorian, aunque solo sea de su belleza y de su manera de actuar. Representa la conciencia moral de Dorian y como tal es asesinado por el protagonista.

TEJIDO INTERTEXTUAL

El retrato de Dorian Gray se refiere de manera implícita al mito griego de Narciso. Este, enamorado de su propia belleza al contemplarse en la imagen que se refleja en el agua de un lago, ya no puede amar a nadie más que a sí mismo. Dorian reitera el comportamiento del personaje mitológico. Basil, en el capítulo I, se refiere  a él llamándolo "Narciso". Esta referencia indirecta permite entender varias ideas de la novela: la línea de conexión con el mundo griego, y el personaje como personificación eterna de la belleza. Mediante este recurso, Oscar Wilde refuerza su  postura esteticista y su admiración por el clasicismo.

Otra alusión perceptible es la del tópico literario del carpe diem, cuyo origen se remonta a las Odas del poeta clásico latino Horacio y cuyo significado es " aprovecha el día, el momento, el presente; vive la vida cuando aún eres joven". Esta enseñanza es la que le transmite, sin mencionar la tradición literaria de donde viene, Lord Henry a Dorian en el capítulo II.

También se presenta otro tópico de origen latino: el ubi sunt (¿dónde esán?).  Este consiste en la pregunta retórica por personajes o cosas notables, valiosas el individuo, que ya no están o "están" en la muerte. Tradicionalmente, se lo ha utilizado para expresar el fin de todo. Entre los aspectos valiosos que desaparecen sin que se advierta cómo se fueron de las manos se hallan la belleza, la juventud,  los bienes terrenales, la vida. Podría decirse, entonces, que la incitación a aprovechar el momento contenida en el carpe diem es una consecuencia de la anterior que produce en el hombre el haberse preguntado "¿ubi sunt?".

 El capítulo XI de El retrato alude a este tópico como complemento del primero mencionado.

LO FANTÁSTICO EN EL RETRATO DE DORIAN GRAY

Entre los temas que se repiten en los textos  fantásticos figura el de la visión y la visibilidad,  la no coincidencia entre lo que se ve y lo que espera ver. Los textos fantásticos hacen que se dude de lo visto. Por eso están articulados  alrededor de tópicos como espejos, cristales, reflejos,  retratos, ojos. El retrato, en el caso de la novela  de Oscar Wilde, es la imagen que representa lo real: la belleza de Dorian. Pero este retrato se vuelve espejo del mundo interior de Dorian: lo que no se ve, no de lo que se ve. Ya no representa más la belleza que inspiró a Basil, sino la fealdad moral. Así se introduce otro tópico de fantástico: la idea del doble o de la multiplicidad del yo. Dorian no es un Dorian sino dos:  el visible y el invisible.

El énfasis sobre lo invisible se hace evidente  en Dorian pues nadie ve lo que él realmente es, ni lo que hace. Por eso se insiste en la doble vida del protagonista que algunos difusamente sospechan, pero que nadie confirma. Lo que no debe verse, que es también lo que el propio Dorian no soporta ver, es llevado a su punto máximo por el lienzo que tapa el cuadro perma­nentemente.

El cuadro está doblemente ocultado: por el lienzo y por el "espacio fantástico" donde se lo esconde. Wilde convirtió el altillo de la mansión en una especie de claustro gótico, propio del género de terror. Es allí donde el protagonista ha intentado aislar lo fantástico. Lo fantástico, en El retrato de Dorian Gray, consiste también en desrealizar el tiempo lineal cronológico. Dorian sigue viviendo durante dos décadas sin alterarse físicamente. Esto resulta extraño para todos los que lo rodean . El presente eterno en que parece desenvolverse la vida Dorian es el de la inmutable belleza propia de la obra de arte.

Todos estos recursos dan como resultado la ilación entre dos realidades, posibles o no posibles, lo que construye lo fantástico como lo narrativo polifónico.

Oscar Wilde y el dandismo

En otro sentido, el autor cultivó el dandis­mo, corriente de pensamiento y conducta que no proponía acercar el arte a la vida sino vivir la vida como si en todo sentido fuera una obra de arte. Su objetivo estético era el de armoni­zar una vida de lujo e insumisión con una obra de arte inmortal. El dandy no admite di­ferencia entre su vida y su obra: ambas deben estar marcadas por los mismos parámetros; de­ben ser complementarias. La misma estética con que se fabrica la obra es la de la indumen­taria: ornamento, contravención a la moda masiva; pero también a las costumbres y a la estética de la familia burguesa. Así, se fabrica una imagen indiferente, desdeñosa de las pa­siones, brillante en la conversación. En defi­nitiva, el dandy construye con su vida una obra de arte donde ostenta la artificiosidad.

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