LAS VARIEDADES DEL LENGUAJE
No todos los
miembros de una comunidad lingüística se expresan de la misma manera. En la
Argentina, por ejemplo, se observan variaciones entre los hablantes de las
distintas provincias en el vocabulario, en la entonación y en la manera de
construir los enunciados. Esto se debe a que la lengua es invariable solo si se
la considera como un sistema abstracto de reglas y signos; cuando la lengua
está en uso, se producen variaciones. Pueden reconocerse variedades que
dependen de la situación comunicativa y variedades que dependen de las
características del hablante.
A la variación
de los usos de la lengua que depende de la situación comunicativa se la denomina registro, y se pueden
reconocer los siguientes tipos:
Un registro formal o informal, que depende
del grado de confianza existente entre los interlocutores.
Un registro profesional o no profesional,
de acuerdo con la temática y el vocabulario utilizado. Si el tema es especifico
de un campo del saber, se emplean términos técnicos del área en cuestión y el
registro es profesional; si, en cambio, se refiere a temas generales, se usa un
registro no profesional.
Un registro oral o escrito,
según cuál sea el canal empleado en la comunicación. En el uso, los registros
se superponen: un registro formal puede darse en forma oral o escrita; el
informal es común en la oralidad, pero también aparece en forma escrita, como
en el caso del chat, que condensa oralidad y escritura.
Existe una variedad estándar, que es la que utilizan las instituciones y los medios de comunicación. Los hablantes la reconocen como la más aceptable, o legítima, y es la que determina las formas "correctas" frente a variedades menos prestigiosas.
Variedades que dependen del hablante
Los lectos son
las variedades de la lengua que dependen de las características del hablante,
vinculadas con su lugar de origen, su nivel socioeconómico o su edad, e
influyen en las distintas situaciones comunicativas en las que participa.
Existen distintas clases: el dialecto, el sociolecto, el cronolecto y el
tecnolecto.
El dialecto es la variedad
lingüística determinada por la ubicación geográfica del hablante o de su
origen. Puede ser general o regional (rural y urbano). Se percibe a través del
idioma, la entonación, la pronunciación y el vocabulario que utiliza. Dentro de
una misma región, pueden convivir diversos dialectos.
Los distintos
grupos o sectores sociales se diferencian por la variedad lingüistica que
utilizan, o sociolecto. Se
identifican por el nivel de educación (escolarizado o no escolarizado), la
situación socioeconómica, los consumos y las pautas culturales, elementos que
les permiten configurar una identidad diferenciada del resto.
La variedad lingüística
determinada por la edad de los hablantes se denomina cronolecto. Este puede ser infantil, adolescente o adulto,
ya que en cada una de esas etapas se observan diferencias en la utilización de
determinadas expresiones.
De igual
forma, existe una variedad lingüística llamada tecnolecto, que diferencia a los
hablantes a partir de su pertenencia a determinado grupo profesional u ocupacional.
La combinación única que hace cada hablante de loslectos, es decir, su modo
particular de emplear el lenguaje, se denomina idiolecto: comprende el dialecto, el sociolecto, el cronolecto y el
tecnolecto y sintetiza el modo en que cada uno usa la lengua.
En una
conversación, se emiten y se reciben múltiples informaciones, más allá del
contenido del mensaje. Se puede inferir la procedencia geográfica de las personas
a través de su acento o su pronunciación, o deducir qué jerarquía o relación
existe entre los interlocutores, de acuerdo con el modo en el que se dirigen:
no será igual si se llaman "che" que "señor", por ejemplo.
Esta relación
entre la lengua y sus usos sociales es el objeto de interés de la Sociolingüística. Para esta disciplina,
la sociedad determina los usos del lenguaje, es decir que los diferentes usos
de la lengua que los hablantes hacen espontáneamente son el efecto de variables
sociales (como la edad, el sexo, la clase social) y el contexto en el que
hablan. De ese modo, los diferentes usos aportan significado social. Fenómenos
como el de no pronunciar la V final o la "c" en el medio de algunas
palabras (vamo, coletivo) son ejemplos de variaciones lingüísticas que poseen
connotaciones sociales: de alguna manera, esas diferencias clasifican a los
hablantes en grupos con mayor o menor prestigio.
La
Sociolingüística explica cómo se distribuyen estas variantes de acuerdo con
distintos grupos sociales y establece una correlación entre las variaciones lingüísticas
(como la pronunciación, el vocabulario o la construcción de frases) y las variables
extralingüísticas (como la clase social, la ocupación o la edad).
Actividades y Guía de lectura
1. Determinen
cuáles son los registros en los siguientes ejemplos y en qué situaciones
comunicativas se utilizan.
a.
Las
penicilinas son antibióticos del grupo de los betalactámicos.
b.
Tenes
que tomar el remedio cada ocho horas.
c.
Le
escribo para felicitarlo por su nota.
d. ¿Preterís que te llame más tarde? ¿Me escuchas?
2- En grupos, debatan estas cuestiones:
a) ¿Las
variables sociales manifiestas en el uso de la lengua pueden provocar situaciones
de discriminación?
b) ¿Creen
que es importante que los medios de comunicación y las instituciones utilicen
la variedad estándar? ¿Por qué?
c) Escriban
un diálogo en el que se aprecie el uso de la lengua como efecto de variables
sociales (edad, sexo o clase social).
Fuente:A A.VV:
Prácticas del Lenguaje 3, Ed. Estrada, Buenos Aires, 2017.
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