EL TEXTO TEATRAL Y EL GUIÓN CINEMATOGRÁFICO O TELEVISIVO: ALGUNAS DIFERENCIAS

EL TEXTO TEATRAL Y EL GUIÓN CINEMATOGRÁFICO O TELEVISIVO: ALGUNAS DIFERENCIAS

Definición de géneros

El guión televisivo o cinematográfico es una variedad de relato que funciona como texto provisorio o pretexto respecto de otro relato: la serie de televisión o la película. Es por eso que se puede decir que el guión es un texto transitorio y una forma escrita destinada a transformarse y desaparecer. El guionista elabora su texto con palabras, pero éstas van a disolverse en imágenes y sonidos. Cuando la obra esté terminada, esas palabras habrán perdido su sentido, o mejor dicho, habrán cobrado otro, producto de la transformación de la puesta en escena. El guión, considerado como un texto incompleto, no acabado, estaría siempre subordinado al filme. De esta manera, nunca sería una obra por sí misma.
En tanto texto escrito, contiene un esquema de acción y el diálogo indispensable, que servirán de base al director para filmas las escenas que se desarrollarán ante la cámara. En ese esquema se detallarán algunos aspectos esenciales como el argumento, los decorados y los paisajes, los movimientos de los personajes, los diálogos, los desplazamientos de la cámara, la iluminación, el sonido, etcétera.

El texto teatral, en cambio, es de naturaleza doble. Por un lado tiene un valor propio, lo que significa que una obra de teatro se puede leer y considerar, en sí misma, texto completo, igual que otros textos literarios, como la poesía o el cuento. En este sentido se diferencia del guión televisivo o cinematográfico, ya que su escritura tiene autonomía.
Por otro lado, se trata de un texto abierto e incompleto que ha sido escrito para ser representado. La obra de teatro como representación no establece una relación directa entre autor y espectador; entre ambos se encuentra el trabajo del director teatral, de los actores, escenógrafos, iluminadores, músicos, etc.

La estructura del guión y del texto teatral

En todo relato o narración se puede establecer una estructura, un ordenamiento del tiempo y del espacio, diferente del ordenamiento de la vida real. Para los guiones cinematográficos o televisivos podemos establecer:

a) Divisiones objetivas: Son las que separan un decorado de otro. Entendemos por decorado todo lugar de rodaje, sea natural o construido expresamente.

b) Divisiones subjetivas: Son segmentos menores. A continuación, las detallamos:

b.1) Escena: Serie de tomas, unidas entre sí por una relación argumental o por un espacio. Una toma es el rodaje efectuado sin interrupción por la cámara fija o en movimiento. Puede durar sólo segundos o varios minutos.

b.2) Secuencia: Se compone de varias escenas correlativas que forman una unidad narrativa completa por su contenido dentro del filme. Es equivalente al capítulo de una novela.

b.3) Parte: Es una división aún mayor que abarca cierto número  de secuencias y separa netamente las grandes etapas de  una película.

Por su parte, el texto teatral se divide externamente en actos  y escenas.

a) El principio y fin de una escena están determinados por la entrada y salida de personajes. Una escena es el tiempo durante el cual aparecen sobre el escenario los mismos personajes. Está definida por meros indicios externos; por eso, en general se requieren varias escenas para lograr una cierta unidad dentro de la acción dramática.

b) El acto ejerce su función en la estructura de la obra teatral, va marcando los tiempos, la intensidad y el crecimiento de la acción dramática. Muchas veces implica un cambio de lugar y de tiempo.

La división tradicional puede ser tanto en cinco como en tres actos. La obra dividida en cinco actos desarrolla la acción dramática siguiendo un esquema que incluye exposición, intensificación, culminación, declinación y desenlace. La obra dividida en tres actos representa la introducción, el conflicto y el desenlace.

Existen también otros modos de estructurar las obras que no
siguen las normas tradicionales. Hay obras divididas en cuatro
o dos actos, y otras, como, en que toda la acción se desarrolla en un solo acto.

Acerca de la escritura del guión y del texto teatral

¿Cuál podría ser el disparador para escribir un guión? Este podría ser una obra original o una obra literaria previa. En ambos casos  es necesario elaborar una serie de acciones básicas, en situaciones visualizadas, a las que se agregarán los diálogos correspondientes. El guión tiene como canal de expresión la imagen en movimiento y el sonido, vista a través del objetivo de cámara y oída por el equipo de sonorización.

Entonces, se hace indispensable que el guión especifique
además de las acciones básicas:

a) parlamento (diálogos)
b) división en secuencias y escenas
c) características de ambientes y personajes
d) indicaciones técnicas (planos, efectos visuales o sonoros)

Es una convención aceptada escribir el guión en dos columnas: a la primera la podríamos llamar banda óptica y en ella se indican las secuencias de imágenes (indicaciones de espacio, movimiento, gestos, posturas del cuerpo, iluminación); la segunda es la banda sonora que contiene los diálogos y la secuencia de sonidos (música, ruidos ambientales, el timbre, el volumen, etc.).

A estas dos columnas se les podría agregar una tercera, la del encuadre, que indica el punto de vista, la variedad de planos para las tomas de la cámara y la ubicación de la cámara. Es habitual que esta tercera banda dé lugar al story-board, serie de dibujos gráficos y fotografías. En general, este último aspecto queda librado a la decisión del director, quien determinará el encuadre o guión técnico.
Existe también otra forma de redactar un guión. La escritura del texto correspondiente a las imágenes se distribuye en forma horizontal y corrida. Debajo de estas indicaciones, separado por un espacio interlineador y en letra destacada, se escribe el texto de los diálogos.

La obra de teatro tiene como canal de expresión la palabra escrita. Aunque esta palabra no muera en la página impresa, ya que cobrará voz y movimiento a través del cuerpo de los actores, es el elemento principal del texto.

En relación con el guión, podríamos decir que el autor teatral
da mucha mayor libertad al director. En el guión, gestos, posturas, encuadres, sonidos, están marcados con todo detalle; en la obra de teatro estas marcaciones sólo aparecen si resultan indispensables y no pueden deducirse por sí solas de la lectura de los diálogos. Así, lo que corresponde a la banda óptica del guión aparece -con muchos menos detalles- en las acotaciones, escritas generalmente entre paréntesis, precediendo al parlamento de cada personaje

Otros elementos que, en el guión, corresponden a la banda óptica, en el texto teatral aparecen al comienzo de cada acto como indicaciones generales de espacio, tiempo, atmósfera. Estas acotaciones pueden reducirse a unas líneas o extenderse a varias páginas.
Es interesante observar la libertad de la representación de una obra teatral. Algunos autores, por ejemplo Shakespeare, se siguen representando después de casi cuatrocientos años. Aunque el texto Romeo y Julieta siga siendo el mismo que Shakespeare escribió, la representación de la obra ha variado completamente.

El director teatral -más que nadie- y los actores, interpretan el texto, y es esa interpretación la que da actualidad y sentido nuevos a la obra.
El guión, en cambio, es tan acotado y preciso que prácticamente agota su significación en una sola filmación.
Pero hay todavía una diferencia más: mientras que la película o  la serie televisiva, una vez que se ha filmado se ha fijado (es idéntica en todas las funciones), la obra teatral se modifica en cada representación. Como se trata de un hecho vivo, ninguna función es ni puede ser idéntica a la anterior. Actores y público mantienen una comunicación viva, en la que unos y otros se condicionan y transforman. Esto ocurre siempre y, según sea el espacio dejado a la improvisación, los cambios podrán ser más menos palpables.

Fuente: Ed.Cántaro-Colección El mirador- Bs.As.,1999