Análisis de
Fuenteovejuna de Lope de Vega
El contenido: un drama histórico
Fuenteovejuna es uno de los mejores dramas de honra escritos por Lope de Vega. Para
su argumento, el autor recurrió a la historia de España. El drama se basa en
un hecho real que sucedió durante el reinado de los Reyes Católicos en el transcurso
de las guerras civiles entre los partidarios de Alfonso V de Portugal,
pretendiente al trono de Castilla, y los leales a Isabel.
La villa de Fuenteovejuna pertenecía a la jurisdicción de Córdoba,
pero Enrique IV la donó a la Orden de Calatrava, cuyo Comendador Mayor, Fernán
Gómez de Guzmán, fijó allí su residencia. El Comendador se ganó pronto la
enemistad de los vecinos de Fuente Ovejuna, a causa de sus abusos con las
mujeres. A esto se añadieron los agravios que causó en la población una
compañía de soldados de Alfonso V que el Comendador había alojado en la villa.
Así las cosas, una noche de abril de 1476, los vecinos de Fuente Ovejuna se
levantaron contra el Comendador al grito de «¡Fuenteovejuna! ¡Vivan los reyes
don Fernando y doña Isabel y mueran los traidores y malos cristianos!».
En la sublevación pereció el Comendador y las investigaciones
posteriores para descubrir y castigar a los culpables no dieron fruto. A las
preguntas del juez, los vecinos sólo respondían: «¡Fuente Ovejuna lo hizo!».
Más tarde, los Reyes Católicos, enterados de las tropelías y los abusos del
Comendador, otorgaron el perdón a la villa.
Estos hechos fueron
recogidos por varios cronistas, como fray Francisco de Rades en su Crónica de las tres órdenes y caballerías de Santiago, Calatrava y
Alcántara, que parece haber sido
la principal fuente de inspiración para Lope.
La organización del texto: una doble acción
dramática
En la obra confluyen
dos conflictos que se corresponden con dos acciones:
- Un conflicto de carácter
nacional, en torno a la guerra
entre Alfonso V de Portugal y los Reyes Católicos. Constituye la acción secundaria.
- Un conflicto de carácter
local, entre el Comendador de
la Orden de Calatrava y el pueblo. Constituye la acción principal, el núcleo del drama.
Se ha dicho que la acción o intriga secundaria es superflua y que entorpece el ritmo de la acción principal.
Por eso, algunos adaptadores modernos de la obra llegan a suprimirla. Sin
embargo, las dos acciones están unidas por la figura del Comendador: en la acción
secundaria, el Comendador actúa como un rebelde ante el poder de Isabel y
Fernando; en la acción principal cumple el papel del tirano.
Lope utilizó en Fuenteovejuna el esquema propio de los dramas de honor: quien deshonra o causa agresión sufre finalmente el castigo o la
venganza del deshonrado o agredido. Se trata de un movimiento de
acción-reacción que podría representarse así:
Los personajes
Los personajes típicos de las comedias de Lope son tres: el galán, la
dama y el gracioso. Mientras que el galán y la dama representan los valores
propios de la nobleza, el gracioso pone el contrapunto humorístico a la
intriga amorosa.
En Fuenteovejuna no se presenta
propiamente este reparto de papeles, aunque es posible reconocer algunos
rasgos del galán y de la dama en la pareja de amantes -Laurencia y Frondoso-
como también se identifican algunos rasgos del gracioso en un personaje
popular: Mengo.
En realidad, las fuerzas que están en conflicto en Fuenteovejuna son otras: el noble
frente a ese personaje colectivo que es el pueblo, verdadero protagonista de
la obra.
Los villanos como
protagonistas
Los villanos obtienen tanto en éste como en otros dramas del Siglo de
Oro un tratamiento especial: representan una forma digna de vivir, al margen de
las intrigas y de las ambiciones de la Corte o de la ciudad.
En la concepción de Lope, nobles y villanos pueden vivir armónicamente
cuando unos y otros cumplen sus deberes. Pero esta relación o contrato se rompe
cuando el señor abusa de su autoridad y comete una injusticia sobre el vasallo.
En tal caso, éste tiene derecho a defenderse e, incluso, a tomar la justicia
por su mano. Es la idea que subyace en otro drama de Lope, Peribáñez y el comendador de Ocaña. El villano
Peribáñez manifiesta así sus intenciones, cuando sospecha que el Comendador
quiere forzar a su mujer:
Soy vasallo, es mi
señor, vivo en su amparo y defensa, si en quitarme el honor piensa quitaréle yo
la vida.
El tipo de villano honrado aparecerá a lo largo de todo el teatro del siglo XVII, desde Lope a Calderón,
quien le dedica uno de sus mejores dramas: El alcalde de Zalamea.
El estilo: la búsqueda de naturalidad
Como autor que desea complacer a un público mayoritario, Lope suele
utilizar un lenguaje sencillo y natural, que intenta parecerse al habla común. En su Arte nuevo dedica algunos versos a
la cuestión del lenguaje teatral más adecuado:
No traya la escritura,
ni el lenguaje ofenda con vocablos exquisitos, porque, si ha de imitar a los que hablan, no ha
de ser por pancayas, por metauros, hipogrifos, sermones y centauros.
Como se ve por la enumeración de estas raras y exóticas palabras, Lope
quiere distanciarse del estilo gongorino y culterano.
Además, Lope adapta el habla de los personajes a su condición social o
a su edad. A este respecto dice:
Si hablare el rey,
imite cuanto pueda la gravedad real; si el viejo hablare, procure una modestia
sentenciosa; describa los amantes con afectos que muevan con extremo a quien escucha.
Evidentemente, el uso del verso impone unas convenciones formales.
Por eso oímos hablar a los campesinos de Fuenteovejuna de una forma muy literaria o convencional, aunque en su habla distinguimos
elementos fónicos, sintácticos y léxicos que se corresponden con el uso rústico
del lenguaje.
Los temas
La combinación de dos acciones permite a Lope tratar varios temas de
interés:
- La acción principal trata el tema de la honra y su reparación.
- La acción secundaria se centra en el tema de la unidad de España y el poder de la Corona
frente a la nobleza
Junto a estos temas aparecen los
siguientes:
- El amor, entendido de dos maneras: el «mal amor», encarnado en la lascivia del
Comendador, y el «buen amor», que ejemplifican Laurencia y Frondoso.
- El elogio de la vida
aldeana.
- La justicia y el derecho del pueblo a
resistir frente al tirano.
El mundo del
drama barroco
El desarrollo de Fuenteovejuna es similar al de cualquier
drama de honor del siglo XVII: el orden o la armonía del mundo se ven perturbados por la irrupción de
un personaje -en el caso de Fuente-ovejuna, un representante de la nobleza- que comete un hecho violento. La obra
culmina con el restablecimiento del orden mediante la actuación de los Reyes
Católicos.
Las tres fuerzas en
acción (el pueblo, el noble y los reyes) se corresponden con las tres etapas
del conflicto suscitado:
ORDEN INICIAL: el
pueblo
RUPTURA DEL ORDEN: la
nobleza
RESTABLECIMIENTO DEL
ORDEN: la monarquía
Queda claro que la crítica de Lope se orienta hacia la nobleza, pero
nunca hacia la Monarquía, que es el vértice del sistema jerárquico en la
sociedad del siglo XVII.
Fuente: A.A.V.V: Literatura española, Buenos Aires, Santillana, 1992.